Museo del Ejército

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Foto: joz

El Museo del Ejército conserva una de las mejores colecciones del mundo de historia militar. Está ubicado en el histórico edificio de Los Inválidos, monumental complejo al que dedicamos una página aparte.

Con la misma entrada se puede acceder a distintos espacios del complejo:

  • La tumba de Napoleón, principal atracción del monumento, ubicada en llamada Iglesia de la cúpula, que también es verdaderamente impresionante.
  • El Museo del ejército, que ocupa distintas alas, y posee pequeños museos dentro del museo.

En la página que dedicamos a Los Inválidos puedes ver un mapa del complejo, con sus distintas entradas, la ubicación de la taquilla y puntos de información, etc.

Respecto al nombre del museo -Musée de l'Armée, en francés-, hay que aclarar que no significa como muchos piensan "museo de la armada", pues "Armada" en castellano designa a las fuerzas navales de una nación; ni tampoco "museo de las armas", sino Museo del Ejército.

Interés de su visita

El motivo principal que atrae a la gente hasta este Museo es poder ver la tumba de Napoleón, y una vez que han pagado la entrada, pasan a echar un vistazo al museo. Pero resulta ser un museo tan entretenido, tan variado, con objetos e historias tan curiosas, que el tiempo se pasa volando. También los niños disfrutan mucho visitando este museo, viendo uniformes, maquetas, armaduras, cañones...

Colecciones y espacios

Dejando aparte la Tumba de Napoleón y las dos iglesias (la de los soldados y la de la cúpula), de las que hablamos en la página dedicada a Los Invalidos, el Museo propiamente dicho está compuesto por distintas colecciones históricas, que a veces son incluso museos independientes dentro del museo.

Sin ánimo de ser exhaustivos, estos son las colecciones más vistosas para el visitante medio que no esté especialmente aficionado a los temas militares:

1. Armas antiguas. De la Edad Media a Luis XIV

Armadura de los leones. Museo del Ejército

Foto: Museo del Ejército

Armas y armaduras desde la Edad Media hasta los últimos reyes borbones. Se incluyen también algunas piezas arqueológicas de interés, como arpones de hueso y hachas de sílex. Hay espadas vikingas, ballestas, armas de fuego...

Hay armas y utensilios de guerra, de caza, de torneo, y de gala... Algunas de ellas contienen adornos, bajorrelieves, incrustaciones y decoraciones en marfil de gran calidad artística.

Uno de los apartados más vistosos es el dedicado a las armaduras, de las que hay una gran variedad, para el jinete y para el caballo. Se ven piezas verdaderamente impresionantes, como algunas armaduras de gala que pertenecieron a Francisco I y su hijo Enrique II, con un trabajo asombroso de damasquinado en oro y plata.

2. Época napoleónica

Particular atractivo tienen también las salas dedicadas a Napoleón Bonaparte, ese coloso de la historia, monstruo criminal para unos, héroe legendario para otros, destructor de media Europa (cualquier rincón del continente conserva cicatrices de la inmensa destrucción que produjo) y constructor de un nuevo orden, ególatra patológico, fuerza de la naturaleza... genio indiscutible en cualquier caso. Todo lo relacionado con su historia está cargado de un aura de leyenda, como si fuera un personaje de ficción.

Y sin embargo aquí se pueden ver tantos objetos relacionados con él: trajes suyos, utensilios y mobiliario de campaña, su cartera oficial como primer cónsul, e incluso el caballo de raza árabe que le permitieron llevarse a Santa Elena, Vizir...

Napoleón

Cuadro de Ernest Meissonier. Foto: G.Garitan

Se exponen numerosos retratos suyos y de sus generales, así como otros cuadros (algunos de ellos muy conocidos) que representan distintos momentos heroicos de la gesta napoleónica. Entre ellos, hay varias obras del gran pintor Ernest Meissonier, muy relacionado –como veremos- con el origen de este museo.

3. Museo de maquetas militares (ss. XVII-XIX)

Se llama Musée des Plans-Reliefs, y contiene 28 grandes maquetas de villas fortificadas. Las primeras pertenecen a la época de Luis XIV, que mostró gran preocupación por "amurallar" no la ciudad de París (de la que derribó sus murallas) sino todo el reino, construyendo una gran cantidad de plazas fuertes, siguiendo la ciencia militar del gran Vauban.

Aunque de hecho parece una sala más del museo, se trata de un museo independiente. Esta es su página web: www.museedesplansreliefs

Una de las maquetas más impresionantes es la del Mont Saint-Michel. Aquí puedes verla en 3D y 360º. Un recurso que te sorprenderá: mont-saint-michel-visualisation-3d

Musée des Plans-Reliefs

Foto: G.Froger

4. Las dos Guerras Mundiales

En realidad, la colección arranca con la guerra franco-prusiana de 1870, antecedente de la Primera Guerra Mundial.

Más de un millar de objetos recuerdan la historia de estos grandes conflictos. Se exhiben uniformes de combatientes (algunos de ellos de personajes históricos como el mariscal Foch o el general Leclerc), armas, maquetas, objetos de la vida cotidiana de los soldados, fotografías, cartas... Están dispuestos en salas ordenadas cronológicamente.

Entre los objetos curiosos de la Primera Guerra Mundial se encuentra, por ejemplo, uno de los taxis que transportaron a los soldados al frente durante la primera Batalla del Marne.

Los alemanes estaban a 30 Km de París y la capital –incapaz de defenderse- parecía a punto de caer. Había que reforzar el frente de inmediato, llevando a todos los soldados disponibles. A falta de transporte militar, el general encargado de la defensa de París requisó los taxis de la ciudad, consiguiendo lo que se conoce como "el milagro del Marne", que cambió el curso de la guerra.

5. Memorial sobre De Gaulle

Por último, uno de los espacios más modernos del Museo es el dedicado a la figura de Charles De Gaulle, que cuenta con abundantes medios audiovisuales e interactivos, enormes pantallas, documentales... para conocer al que fue una de las figuras políticas más destacadas en la Francia del siglo XX, alma de la Francia libre durante la Segunda Guerra Mundial, y el fundador de la V República francesa.

Espacio De Gaulle. Museo del Ejército

Foto: Moatti-Riviere

El proyecto de este impresionante espacio fue diseñado por el estudio de arquitectura Moatti-Rivière. En su web puedes verlo con detalle.

Historia del Museo

A modo de curiosidad, el Museo fue creado en 1905, como resultado de la fusión de dos museos distintos:

  • El Museo de la Artillería, creado durante la Revolución Francesa (1796) con el material que existía en el Arsenal, junto a la fortaleza de la Bastilla, y en el Guardamuebles de la Corona. Luego se fue enriqueciendo con numerosas capturas napoleónicas. En 1871, tras la caída de Napoleón III, el Museo de la Artillería se instaló ya en los Inválidos.
  • El Museo Histórico del Ejército, creado en 1896 por un grupo de apasionados de la historia militar: coleccionistas, historiadores, militares... Entre ellos, un papel muy destacado lo tuvieron los pintores especializados en temática militar, como los célebres Esnest Meissonier y Édouard Detaille que, en su afán de precisión histórica y fidelidad a los detalles, contaban con magníficas colecciones de uniformes y utillaje militar.

    Ernest Meissonier

    Ernest Meissonier

    La idea de constituir el museo había surgido unos años antes, con ocasión de la Exposición Universal de 1889 (la de la Torre Eiffel), donde el Pabellón del ministerio de Guerra, situado en la explanada de los Inválidos, había cosechado un gran éxito de público. Animados por ello, estos apasionados del ejército constituyeron una Sociedad, que llamaron La Sabretache (aún existente hoy en día), con el objetivo de constituir un museo permanente.

    Este curioso nombre viene porque en 1991 lanzaron un llamamiento en prensa para recoger todo tipo de material militar, y el primer objeto que les llegó fue una "sabretache" de la época del Consulado. La sabretache es una especie de bolsa de cuero, plana, propia del uniforme de los húsares. La llevan colgada al mismo cinto donde se engancha el sable y su nombre significa "bolsillo" (tache) "del sable" (sabre). Puedes verla también en la foto inicial.

    Húsar con uniforme de gala

    Húsar con su sable y su sabretache

    El museo arrancó en 1896 con todo el material que habían conseguido reunir. Los principales fondos en ese momento provenían la colección personal de Ernest Meissonier, que había estado muy implicado en el nacimiento de La Sabretache, y había fallecido unos años antes. En 1912, a la muerte del gran pintor Édouard Detaille, se unió también su colección personal. Pero para entonces el museo se había fundido ya con el de Artillería, formando el actual Museo del Ejército.

Información práctica

El tiempo que emplees en el Museo del Ejército dependerá mucho de lo que te interesen esos temas, pero debes calcular como mínimo un par de horas.

Horario de apertura

  • 10 - 18 h
  • Martes hasta las 19 h o las 21 h en algunos momentos
  • No cierra ningún día de la semana
  • Más información sobre horarios: musee-armee.fr - horarios

Tarifas

  • Normal: 14 €
  • Reducida: 11 € (a partir de las 17 h en verano y las 16 h en invierno; compensa si solo quieres ver la tumba de Napoleón; si quieres ver el museo no compensa)

Gratis

  • Menores de 18 años
  • Parados
  • Minusválidos y un acompañante
  • Periodistas de la UE

Más información

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